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Luz antiniebla delantera
Las luces antiniebla son luces muy brillantes que pueden estar ubicadas en la parte delantera o en la parte trasera del auto. Por lo general se instalan en la parte baja del auto y apuntadas hacia el suelo en ángulo agudo.
Comúnmente se les llama luz antiniebla, porque es el fenómeno meteorológico que más frecuentemente disminuye la visibilidad en la carretera, y no es más que un conjunto de nubes que se presentan a la altura del camino, las cuales dependiendo de la concentración de las gotas que la forman pueden ser más o menos densa.
También son útiles con otras situaciones meteorológicas adversas como son lluvia, granizo, nieve o incluso tormentas o nubes de humo o de polvo. Los fenómenos meteorológicos pueden presentarse de forma repentina y con diferentes intensidades por lo que es mejor estar preparados.
Otro uso para las luces antiniebla es prenderlas en las vías estrechas (con un ancho de 6,5 metros o menor) con muchas curvas señalizadas como peligrosas entre el amanecer y el atardecer.
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El uso correcto de la luz antiniebla delantera
El uso de las luces antiniebla delanteras es opcional, ellas nos permiten dos cosas: la primera es mejorar nuestra visibilidad para poder conducir mejor y la segunda que nos vean mejor, lo cual nos hace estar más seguros en la carretera.
Con la luz antiniebla delantera no se logra tener mucho alcance sino iluminar lo que hay inmediatamente delante del automóvil, por lo que no sirve para iluminar la carretera, en caso de que no haya ninguno de los fenómenos explicados anteriormente.
Tipos de Luces Antiniebla
Existen varios tipos de luces antiniebla, para garantizar su máxima seguridad durante los viajes en carretera:
- Luces antiniebla LED: son más populares cada día, ya que aunque es más costosa su primera instalación, se ahorra dinero a largo plazo porque pueden durar años. Son muy brillantes, consumen menos energía y no son tan propensos a la vibración. Las podemos encontrar como:
- Faros para todoterreno: son faros con luces LED con una salida de 18W, son resistentes ya que están hechos de aluminio, duran cerca de 30.000 horas y alcanzar hasta 85 grados.
- Luces antiniebla LED redondas: son luces redondas de estilo atornillado, con diseño impermeable para evitar daños por humedad y polvo. Son redondas y fáciles de ajustar.
- Luces antiniebla HID: son luces que utilizan gas xenón para producir luz. Una chispa de electricidad de alto voltaje produce una luz azulada clara y brillante (muy parecida a la luz diurna). Aunque recientemente se han comercializado variedades con luz púrpura y blanca.
- Luces antiniebla halógenas: son las tradicionalmente utilizadas, con la tecnología más antigua, por lo que es la más disponible y económica, se colocan en serie. Utilizan un bombillo con un filamento y gas halógeno. La desventaja es que las luces halógenas se calientan a altas temperaturas y son propensas a quemarse.
Como escoger unos faros antiniebla eficaces
No todas las luces antiniebla que se consiguen en el mercado son eficaces. Su función debe ser ayudar al conductor en condiciones adversas. Un buen patrón hace la diferencia, es recomendable:
- Que tengan un patrón ancho de haz de entre 70 a 120 grados.
- Que el faro tenga un punto de corte plano en la parte superior para reducir la cantidad de luz dirigida hacia arriba y así reducir la reflexión de la luz en el campo de visión del conductor.
- La luz de niebla amarilla promedio es menos eficaz que la luz de niebla blanca promedio.
Sobre la instalación de las luces antiniebla
La instalación de las luces antiniebla siempre debe realizarse junto con el alumbrado de posición, pero debe poder encenderse y apagarse de manera independiente al resto del alumbrado. La mayoría de los kits tienen instrucciones detalladas sobre la instalación y será diferente para cada modelo de auto.
Pasos a seguir:
- Lo primero es conocer las restricciones legales en tu localidad: no todos los tipos de luces están aprobadas por los organismos competentes, por lo que debemos tener información sobre el tipo de luz y los colores permitidos.
- Elegir el tipo de bombillo: ya sea LED, HID o halógeno.
- Luego hay que elegir el estilo de montaje de luces:
- Soporte de parachoques: el más comúnmente utilizado, ya que la mayoría de las luces antiniebla vienen en este formato de fábrica y encajan en orificios diseñados específicamente.
- Montaje de parrilla: es el más frecuentemente utilizado en camiones y SUVs, se instalan en la rejilla frontal o directamente detrás de ella.
- Montaje en rack: también utilizado en camiones y SUVs, se montan sobre el vehículo o sobre una protección de cepillo frontal.
- Compre las luces seleccionadas.
- Estaciones y apague el vehículo en una superficie nivelada.
- Ubique los faros antiniebla ya instalados.
- Desconecte el interruptor de la luz antiniebla de la carcasa separando el clip.
- Retire la arandela, el perno y la tuerca, lo cual permitirá quitar la carcasa del faro antiniebla.
- Inserte el nuevo faro antiniebla, el cual debe ajustarse en el espacio dejado por el antiguo, asegurándose de que los orificios de los pernos estén alineados.
- Inserte el perno, coloque la arandela y enrosque la tuerca sobre el perno, asegurándose de que quede ajustada e inmóvil.
- Vuelva a colocar el interruptor y ajustar el clip.
- Encienda el auto y verifique que funcionan y que están en el ángulo apropiado (que no brille en los ojos de los demás conductores).
Riesgo de no utilizar adecuadamente las luces antiniebla
Las luces antiniebla brindan seguridad en la carretera en momentos de baja visibilidad, lo cual puede salvar su vida y la de aquellos que están en el camino, si se usan correctamente.
Si no se usan adecuadamente y se dejan encendidas todo el tiempo, en condiciones normales de visibilidad tienden a dilatar sus ojos, esto reduce su visión de largo alcance, lo cual dificulta ver adecuadamente la carretera lejos del vehículo en la oscuridad.
Los faros antiniebla se utilizan siguiendo una regla de baja velocidad que varía dependiendo del grado de visibilidad de la carretera, por lo que no le permitirá conducir a alta velocidad a través de la nieve o niebla.